sábado, 9 de julio de 2011

¿Qué pasa con Messi?

He estado viendo los partidos de la Copa América este año, en Argentina, y en general, no ha habido muchos goles ni partidos muy impresionantes. Lo más emocionante hasta ahora han sido el partido de Colombia contra Argentina, en que Colombia mostró un gran nivel, y el de Uruguay contra Chile, en que ambos equipos pusieron todos sus recursos buscando la victoria, que no llegó, pero permitió ver en acción a los dos en buena forma y buen fútbol.

Lo que realmente me ha sorprendido hasta ahora, es que al ver la transmisión de FOX Sports, recordé por qué dejé de ver ese canal hace ya tiempo. Es sorprendente cómo presionan los argentinos a un sólo jugador, como si el hombre fuera un ser sobrenatural. Hablan por horas continuas sobre Messi, lo idolatran, lo endiosan, y al mismo tiempo, lo critican y se muestran decepcionados, hasta casi traicionados, por las expectativas que ellos mismos inflan a costa del jugador.
Para nadie es un misterio que Messi no rinde de la misma forma en el Barcelona que en la selección de Argentina, el real enigma es hasta cuándo los trasandinos seguirán insistiendo en buscar un resultado individual en un deporte colectivo. ¿Acaso ignoran que para que funcione el jugador tiene que tener 10 compañeros en la cancha? ¿No es prueba suficiente que una y otra vez pase lo mismo? Que Messi no es el mismo del Barcelona, que no es un líder natural (¿por que diablos tendría que serlo?), que se esperaba más de él...

Es un axioma en la sociedad argentina (al parecer) el uso y abuso de un ícono del cual se esperan resultados a nivel mesiánico, como Maradona, Perón, el Che, Evita, etc, remontándose quizás hasta el mismo Martín Fierro. Todos son elevados a niveles sobrenaturales, esperando que ofrezcan milagros, y al mismo tiempo, se resaltan las características menos gratas, que los hacen más humanos, como si fueran crímenes imperdonables, exagerando todo lo relativo a tales personajes.
Esto se traduce en una actitud provinciana, en el caso de FOX Sports, que llega a niveles francamente molestos, cuando en medio de una transmisión de un partido entre equipos de dos países, se ponen a hablar de fútbol argentino, dejando de lado la transmisión, o cuando, justo después de plantear (por la pauta, que seguramente es obligatoria, al menos al enumerar titulares) el partido entre dos selecciones, por ejemplo el partido de Chile y Uruguay, vuelven a hablar de Argentina, Messi y todo el eterno verso psicótico de alabarlo y criticarlo al mismo tiempo, por horas.

¿Qué pasa con Messi? Simplemente que es muy ingenuo pensar que va a funcionar de la misma forma si no tiene los mismos compañeros de equipo que en el Barcelona; su talento es innegable, pero no hace (ni va a hacer) milagros. La presión que día a día la prensa argentina pone sobre los hombros de ese jugador es impresionante, y probablemente, influye de forma negativa en su desempeño. El gran misterio en realidad, es entender cómo los argentinos no son capaces de darse cuenta.