Esta noche, vendría (aún lo estoy esperando) el Dalai Lama (un amigo) a que revisara su notebook, pues aparentemente todo falla, así que un rápido vistazo/reinstalación probablemente solucione la mayoría de sus problemas. Para ello, hablé con mi compadre de toda la vida, Arnold, también conocido a nivel nacional como Cardigas, en la comunidad virtual de Lineage2, para que me facilitara algunas versiones actualizadas de software, usadas en estos casos.
Como siempre, no fue necesaria mayor excusa, y nos encaminamos a una nueva gesta sanguchera al Ñam Ñam, local tradicional del centro de Temuco, para aquellos que se ríen de las enfermedades cardíacas, y miran con desprecio a los vegetarianos. Numerosas veces hemos llegado ahí a desfallecer comiendo. Cocinan casi al frente de uno, y se caracteriza el local por tener ingredientes frescos, además de estar practicamente en pleno centro de Temuco (que no es muy grande en todo caso xD).
Bueno, estábamos ya instalados con mi compadre, arreglando el mundo, cuando aparece la mesera que nos tomaría la orden. Cuando le dijimos "Barros Luco palta mayo", se quedó quieta, y no dijo nada... Tres segundos después, se acercó al menú que ella misma nos había traido, y empezó a buscar desde la página uno. Ya eso fue algo medio surrealista, y casi sin pensarlo, le dije , -"el barros luco es carne a la plancha con queso, más los acompañamientos que te mencionamos, palta y mayonesa".
-"Ahhhh, ok, ¿Y qué número tiene en el menú ese plato?"
-"errrhh.... no se, ahh mira, acá está, es el 987"
Con eso ya nos habíamos sorprendido un poco, de hecho le pregunté de dónde era, ya que en ese momento sólo se me ocurrió que un extranjero no conociera un barros luco, y más encima si así fuera, que no supiera de qué se trataba el local donde trabajaba, ya era bastante bizarro; para que me entiendan, es como entrar a una pizzería y que te respondan "Qué es eso?" (Aunque una vez en un aeropuerto, en Forth Worth, TX me pasó algo más o menos así).
Pero eso no era todo, pedimos ambos un fanshop mediano (cerveza con una parte de fanta, muy refrescante y buen compañero para el barros luco) y nos dice "ehhh no hay fanta...". A mi compadre Arnold ya se le estaba hinchando la vena de la frente, parecía que tuviera un dedo bajo la piel. Se me ocurrió una idea, "Bueno, ¿y tienes Bilz?" (cerveza con Bilz no queda nada mal, además tenía mucha sed), "mmm no, no tampoco" (silencio) "A ver, entonces, mejor dinos qué bebidas tienes", "Solamente me queda Pepsi"... "pues bien, entonces tráenos un par de Pepsis mejor, y quedamos ok".
Grande fue nuestra sorpresa, aunque Arnold dice que mi mandíbula chocó con mis rodillas, cuando regresa nuestra especial camarera, y con una sonrisa giocondezca, con voz de triunfo, nos dice "Acá les traigo sus PEPSISHOPS", mientras equilibraba en cada mano una jarra de un brebaje indescriptible y café, como agua de inodoro, antes de tirar la cadena, pero después de un uso intensivo...
Arnold iba a empezar a pararse y decir algo, pero lo tomé del brazo, y le expliqué a la señorita, "creo que hay un malentendido, nosotros originalmente queríamos un fanshop, luego pasamos por ver qué bebidas había, y finalmente te pedimos un par de Pepsis, pero la combinación con cerveza se acabó cuando dijiste que no había Bilz".
La mesera cambió como por 7 colores diferentes su cara, y se fué al fondo a buscar nuestras Pepsis. Cuando trajo finalmente las bebidas, trajo también los sanguchones (sandwich es muy siutico para describir una bestia nacida en ÑamÑam Temuco), lo que nos alegró... por unos segundos, pues nos trajo un churrasco italiano, es decir no un barros luco, propiamente.
Arnold de hecho no puede comer tomate por no se qué cosa, pero ya a esas alturas preferimos reirnos del asunto, "Probablemente es su primer pedido, del primer día en este trabajo, que seguramente es su primer trabajo, y la primera vez que sale de su casa, o que habla con otro ser humano, al menos que sea chileno y que tenga que ver en algo con platos de comida".
Para cerrar la historia, después que hasta nos habíamos compadecido, nos trajo la cuenta, sin que la pidieramos (supongo que cachó instantáneamente que no ibamos a pedir nada más, pero igual, fue un poco rudo), y cuando la trajo, no trajo el detalle, y trajo sólo la suma, que llegaba a casi 11 mil pesos...
Mientras veía nuevamente que surgía el dedo subcutáneo en la frente de mi amigo, me adelanté y pedimos que nos trajera el detalle de la cuenta, y menos mal esta vez vino el encargado del local, que nos dijo con una sonrisa similar a la del Gato de Alicia en País de las Maravillas "ahhh disculpen señores, por error se les cobró los shops que finalmente no consumieron..."
Nos devolvió la diferencia que eran poco más de dos lucas, y le dejamos $300 de propina, y salimos como si nada, no fuera que la camarera nos trajera un curanto o un pastel de choclo mientras nos parábamos...
Como siempre, no fue necesaria mayor excusa, y nos encaminamos a una nueva gesta sanguchera al Ñam Ñam, local tradicional del centro de Temuco, para aquellos que se ríen de las enfermedades cardíacas, y miran con desprecio a los vegetarianos. Numerosas veces hemos llegado ahí a desfallecer comiendo. Cocinan casi al frente de uno, y se caracteriza el local por tener ingredientes frescos, además de estar practicamente en pleno centro de Temuco (que no es muy grande en todo caso xD).
Bueno, estábamos ya instalados con mi compadre, arreglando el mundo, cuando aparece la mesera que nos tomaría la orden. Cuando le dijimos "Barros Luco palta mayo", se quedó quieta, y no dijo nada... Tres segundos después, se acercó al menú que ella misma nos había traido, y empezó a buscar desde la página uno. Ya eso fue algo medio surrealista, y casi sin pensarlo, le dije , -"el barros luco es carne a la plancha con queso, más los acompañamientos que te mencionamos, palta y mayonesa".
-"Ahhhh, ok, ¿Y qué número tiene en el menú ese plato?"
-"errrhh.... no se, ahh mira, acá está, es el 987"
Con eso ya nos habíamos sorprendido un poco, de hecho le pregunté de dónde era, ya que en ese momento sólo se me ocurrió que un extranjero no conociera un barros luco, y más encima si así fuera, que no supiera de qué se trataba el local donde trabajaba, ya era bastante bizarro; para que me entiendan, es como entrar a una pizzería y que te respondan "Qué es eso?" (Aunque una vez en un aeropuerto, en Forth Worth, TX me pasó algo más o menos así).
Pero eso no era todo, pedimos ambos un fanshop mediano (cerveza con una parte de fanta, muy refrescante y buen compañero para el barros luco) y nos dice "ehhh no hay fanta...". A mi compadre Arnold ya se le estaba hinchando la vena de la frente, parecía que tuviera un dedo bajo la piel. Se me ocurrió una idea, "Bueno, ¿y tienes Bilz?" (cerveza con Bilz no queda nada mal, además tenía mucha sed), "mmm no, no tampoco" (silencio) "A ver, entonces, mejor dinos qué bebidas tienes", "Solamente me queda Pepsi"... "pues bien, entonces tráenos un par de Pepsis mejor, y quedamos ok".
Grande fue nuestra sorpresa, aunque Arnold dice que mi mandíbula chocó con mis rodillas, cuando regresa nuestra especial camarera, y con una sonrisa giocondezca, con voz de triunfo, nos dice "Acá les traigo sus PEPSISHOPS", mientras equilibraba en cada mano una jarra de un brebaje indescriptible y café, como agua de inodoro, antes de tirar la cadena, pero después de un uso intensivo...
Arnold iba a empezar a pararse y decir algo, pero lo tomé del brazo, y le expliqué a la señorita, "creo que hay un malentendido, nosotros originalmente queríamos un fanshop, luego pasamos por ver qué bebidas había, y finalmente te pedimos un par de Pepsis, pero la combinación con cerveza se acabó cuando dijiste que no había Bilz".
La mesera cambió como por 7 colores diferentes su cara, y se fué al fondo a buscar nuestras Pepsis. Cuando trajo finalmente las bebidas, trajo también los sanguchones (sandwich es muy siutico para describir una bestia nacida en ÑamÑam Temuco), lo que nos alegró... por unos segundos, pues nos trajo un churrasco italiano, es decir no un barros luco, propiamente.
Arnold de hecho no puede comer tomate por no se qué cosa, pero ya a esas alturas preferimos reirnos del asunto, "Probablemente es su primer pedido, del primer día en este trabajo, que seguramente es su primer trabajo, y la primera vez que sale de su casa, o que habla con otro ser humano, al menos que sea chileno y que tenga que ver en algo con platos de comida".
Para cerrar la historia, después que hasta nos habíamos compadecido, nos trajo la cuenta, sin que la pidieramos (supongo que cachó instantáneamente que no ibamos a pedir nada más, pero igual, fue un poco rudo), y cuando la trajo, no trajo el detalle, y trajo sólo la suma, que llegaba a casi 11 mil pesos...
Mientras veía nuevamente que surgía el dedo subcutáneo en la frente de mi amigo, me adelanté y pedimos que nos trajera el detalle de la cuenta, y menos mal esta vez vino el encargado del local, que nos dijo con una sonrisa similar a la del Gato de Alicia en País de las Maravillas "ahhh disculpen señores, por error se les cobró los shops que finalmente no consumieron..."
Nos devolvió la diferencia que eran poco más de dos lucas, y le dejamos $300 de propina, y salimos como si nada, no fuera que la camarera nos trajera un curanto o un pastel de choclo mientras nos parábamos...