martes, 16 de marzo de 2010

¿Y dónde estaba Farkas?

Recorriendo la internerds, me encontré con una explicación de qué hizo Farkas (el famoso millonario conocido por sus excentricidades) durante la teletón en la que se recaudaron más de 30 mil millones de pesos, en ayuda de las víctimas del terremoto y maremoto. Tengo mis reservas, lamentablemente, sobre cómo se canaliza esa ayuda, aunque creo que, como nunca, los empresarios más importantes del país se manifestaron generosamente con la causa común, cosa que no ocurre con las teletones normales, en ayuda a los discapacitados, lo que nos lleva de regreso a la primera pregunta, ¿Y dónde estaba Farkas?

Al parecer, Farkas buscaba un lugar muy afectado, que no estuviera siendo asistido y al que pudiera ir y volver en un día, pues no habría condiciones para quedarse. Así, el miércoles 3, salió destino a Iloca con 17 camiones y unas 200 ó 300 toneladas de ayuda, sobre todo alimentos, carpas y frazadas. Temiendo saqueos, fue apoyado por Carabineros, que le envió un vehículo a cargo de un capitán y que encabezó el convoy. A media mañana, una llamada le advierte de una especie de "asalto de autoridad" que ocurriría en Curicó, donde el alcalde pensaba de algún modo apropiarse de esta ayuda para dar un golpe político personal. Preocupados, Farkas y su gente cambian la ruta y se van por Teno.
Aquí empieza la historia con otra de estas "autoridades", también alcalde. El primer incidente ocurre cuando éste aparece ante la comitiva de camiones, haciendo señas para detenerla. El alcalde en cuestión saluda a Farkas y, de inmediato, increíblemente, le pide ayuda para reparar los daños de su propia vivienda. Sostiene que no tenía ropa, no se había bañado y quería ayuda. La negativa fue elocuente: sus prioridades como autoridad debían ser otras. No logrado ese propósito, el edil solicita ser él quien distribuya la ayuda en su comuna, según su criterio. Tampoco lo logra. Frustrado, entonces, se pone al frente de la caravana, delante del auto de Carabineros.
El segundo incidente ocurre al llegar a Licantén. Curiosamente, en una intersección, unos conos impedían seguir derecho por un camino en perfectas condiciones y, casualmente, un camión basurero estaba estacionado a un costado. El alcalde hacía señas, y trataba de llevar el convoy por otro camino. Pero como no lo siguen y empiezan a mover los conos, el camión de basura se mueve para bloquear el camino. El capitán del convoy lo obliga a moverse y así sigue la comitiva, dejando atrás al alcalde.Saliendo de Licantén, el convoy es nuevamente detenido y Carabineros incauta dos camiones con 60 toneladas con leche, argumentando la debilidad de un puente. El capitán discute con el mayor: pierde capitán. Farkas se desespera. Se comunican con el general que había facilitado el apoyo policial. General llama a mayor: pierde mayor. La comitiva vuelve a rodar, y obviamente no hubo problema con el puente.
En el cruce del camino Iloca-Curepto, el alcalde se juega el último recurso y un nuevo carabinero detiene el convoy: otro puente impediría el avance. Farkas discute con el oficial y reclama que las autoridades le impiden dar ayuda para la gente. Justo en ese momento aparece un equipo del programa La Ley de la Selva que iba en la misma dirección y que saca las cámaras para grabar la disputa. Ahora son las cámaras de TV versus carabinero: ganan las cámaras y el oficial deja pasar al convoy. Con este puente tampoco hubo problemas.

Finalmente, los alimentos llegaron a Iloca y Farkas los distribuyó directamente a la gente que los necesitaba. Esta vez Farkas fue anónimo, como también lo fue el curioso alcalde, cuyo primer instinto fue su propia casa y el segundo la gloria eventual. Una anécdota del terremoto que deja muchas lecciones.

2 comentarios:

  1. Me da mucha pena que sea asi las cosas, aunque yo se que el instinto animal/humano es...salvarse solo. Pero uno piensa que alguien trabajando en algun puesto politico esta ahi porque quiere ayudar a la gente.

    No sabia esta historia. Increible. Y tambien he escuchado que hay una ley que penaliza los que donan grandes cantidades de plata...o sea, tienen que pagar mas impuesto. No se si sera verdad.

    Farkas sigue siendo heroe para mi. El y Bill Gates. Me ENCANTA su mirada y su generosidad. Realmente me inspira.

    ResponderEliminar
  2. Así es, las donaciones deben pagar un impuesto bastante fuerte. Lamentablemente, es para prevenir otras situaciones aún peores, en que algunas personas aparentemente donan cosas, pero para defraudar a sus acreedores, por ejemplo, de ese modo se obstaculiza que sea tan fácil. En el caso de donaciones por catástrofe, al contrario, esas donaciones se pueden deducir incluso de los impuestos, hasta donde tengo entendido.
    La actitud de esos políticos en todo caso, es excepcional, la mayoría de los políticos de pueblos pequeños trabajan silenciosa y esforzadamente por los suyos.
    Farkas en lugar de irse a lucir a la TV se fue directamente donde se necesitaba la ayuda, eso es digno de aplauso e imitación, tanto como algunas fotógrafas que colectan generosamente ayuda para ayudar a aquellos que lo necesitan, que también me parece admirable.

    ResponderEliminar

Ten en cuenta que si haces un comentario en este blog, estás tácitamente aceptando que eres también una marmota... ¡Bienvenido/a al club!